Todos los años, cuando se va a iniciar el año escolar un tema surge con fuerza mediática: los libros de textos escolares. Y hay una fuerte razón para ello, los precios a los cuales han llegado estos es escandalosa. Para una familia de clase media, preparar a sus hijos para el inicio de año escolar, es una inversión apreciable.
Que detrás de los libros de textos hay un gran negocio, no es nuevo y es obvio. Quienes se dedican a esta actividad lo hacen para producir dinero. Quizás ha faltado un tratamiento especial por parte del Estado en esta actividad, a fin de que la producción de este recurso no se convierta en el dolor de cabeza de todos los años.
Hay sectores que han levantado la bandera del texto electrónico, que sin duda ha ido creciendo su uso de manera significativa, con la ventaja para los estudiantes de que esta herramienta es «como si fuera parte de su cultura».
Ahora bien, en torno al libro de texto el mayor problema no es el que tiene que ver con su precio, sino con su uso. Quienes hemos tenido la oportunidad de acercarnos al aula dominicana con la mirada del evaluador o investigador, siempre hemos planteado una gran debilidad: el libro se ha constituido en la herramienta por excelencia de los procesos de aula; más todavía, el libro fuera el currículo. El maestro y la maestra, en sentido general, limita su gestión pedagógica a seguir las indicaciones del texto. Y en esta situación hay dos aspectos complicados: el primero es, que un libro de texto por sí solo, no recoge todas indicaciones metodológicas sugeridas por el currículo y que son necesarias para propiciar procesos de aprendizaje en cada uno de los y las estudiantes. El libro, a lo sumo, es una guía, pero no es el currículo. En ocasiones, por razones de producción y edición, el libro presenta limitaciones en el abordaje de los contenidos, saltos en dichos contenidos, atrasos respecto al desarrollo del conocimiento científico en algunos tema (sobre todo en lo que respecta a la ciencia de la naturaleza) y en el peor de los casos, visiones sesgadas de algunos temas o incongruencias, propias de la concepción ideológica de quien lo produce (esto se puede apreciar particularmente en lo que respecta a las ciencias sociales), además de errores en la manera cómo se organizan los contenidos a partir de cómo aprenden los sujetos, en sus diferentes etapas de desarrollo. El decir, el libro no puede ni debe constituirse en la única herramienta de trabajo del aula. Un buen libro, a lo sumo, es una buena oportunidad para generar procesos de aprendizaje de determinado tipo, no de todo lo que implica aprender. Lo segundo es, cómo se hace uso del texto en el aula. En la mayoría de las situaciones de aula, el libro de texto se convierte en la única fuente de información, con el agravante de que su uso sólo propicia procesos de aprendizaje memorísticos. El estudiante se ve en la necesidad de aprenderse la lección para repetirla en el caso de que se le pregunte al respecto. De esta manera, la finalidad de desarrollar competencias lectoras críticas y analíticas, desarrolladoras de procesos construcción de conocimientos, termina siendo una actividad fallida. Muchos docentes no saben otra estrategia que poner a los estudiantes a repetir lo que aparece en el texto.
Ambos aspectos nos conducen al tema de la gestión pedagógica en el aula. ¿Cuáles son las características fundamentales de este proceso en el aula dominicana? En un estudio realizado por Ancell Scheker acerca de estas características encontró lo siguiente:
- Los propósitos del proceso educativo, no son comunicados a los estudiantes, sus familias, como tampoco aparecen explícitos en la acción pedagógica del aula.
- Los contenidos curriculares no son asumidos por los maestros, ni en el discurso ni en la práctica.
- Las estrategias de enseñanza son principalmente memorísticas y rutinarias.
- La planificación se realiza de forma asistemática y discontinua; y en muchas ocasiones se hace sólo como cumplimiento formal a las instancias de supervisión.
- La pizarra continúa siendo el principal recurso empleado en el aula.
- Y en la evaluación prima la medición de los conocimientos, y no su valoración o caracterización.
Estas evidencias ponen al descubierto la naturaleza y características de los procesos pedagógicos de aula, que priman en muchas de nuestras escuelas. Por esa razón, cuando nuestro estudiante se ve ante una evaluación internacional en la que debe mostrar altas competencias de comprensión lectora y/o aplicación de conocimientos en la resolución de problemas, así como capacidad para producir, de manera coherente, un texto escrito, el mismo presenta niveles de logros muy bajos. Han sido los casos del Primer y Segundo Estudio Regional Comparativo y Explicativo del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad Educativa: OREAL/Unesco (PERCE 2000 y SERCE 2008), como también del Estudio Internacional de Educación Cívica y Ciudadana (ICCS 2010).
¿Se trata solo de una cuestión de gestión pedagógica? ¿Es que el maestro no cuenta con las herramientas didácticas para la enseñanza?
En un estudio realizado por el Instituto Dominicano de Evaluación e Investigación de la Calidad Educativa (IDEICE) en el 2012, en el marco de la Coordinadora Educativa y Cultural Centroamericana (CECC), en el cual se exploró el dominio y aplicación de la propuesta curricular en comprensión lectora en el aula, así como los niveles de dominio de lo que se debe enseñar en matemática, todo ello en una muestra representativa, a nivel nacional, de docentes del Primer Ciclo del Nivel Básico en escuelas públicas dominicanas (2,244 docentes (179 acompañantes de la práctica de aula y 2,065 maestros y maestras de 1º a 4º del Nivel Básico), se encontró:
- Sólo una maestra de zona rural presentó un desempeño alto de dominio (100%) alcanzado sólo por especialistas, 14.76% presentó un nivel medio de dominio en el enfoque constructivista y el 85.20% se ubicó en el nivel más bajo de dominio del enfoque.
- El rendimiento promedio de los docentes fue de 59.43, con una desviación estándar de 16.60. El mayor rendimiento se obtuvo en los temas de geometría con 65% y el menor en mediciones con 45%. El 63.3% de los docentes obtuvieron calificaciones por debajo de 65 puntos.
Es decir, en este estudio se puso de relieve que nuestros docentes no dominan lo que tienen que enseñar. Que la formación que recibieron en las universidades no les proporcionó o generó en ellos, los aprendizajes necesarios acerca de lo que tienen que enseñar.
La pregunta lógica sería: ¿de qué sirve incluso un libro de texto, si quien tiene que ser el gestor de los procesos de aprendizaje, no domina estos contenidos?
Esta evidencia plantea una cuestión fundamental en materia de política educativa: el mayor esfuerzo y la mayor concentración debe colocarse en la formación inicial y continua de los docentes, que tienen la responsabilidad de desarrollar todas las oportunidades necesarias para que nuestros niños, niñas y adolescentes aprendan.
Libros de textos, gestión pedagógica y formación de maestros son tres cuestiones que deben ser analizadas, comprendidas y abordadas de manera integral, pero a partir de un eje fundamental: docentes altamente capacitados y con las competencias necesarias para desempeñar dignamente su labor docente.
Muy buenas, profesor. No deja de sorprender que la globalización no se limite a acelerar el flujo de mercancías, los productos de consumo o los bienes materiales. La globalización expande también, y quizás con mayor rapidez, productos culturales, modas, ideas y debates. Con las particularidades o singularidades que se quiera, que las habrá, muchas de las apreciaciones del profesor podrían ser exportadas al contexto de dónde yo vengo y podrían ser igualmente válidas y tenidas muy en cuenta.
A nivel personal, y visto de nuevo con ojos de español, comparto la necesidad de invertir en la formación inicial y continua del profesorado. Hay unos estudios muy repetidos por la sociología de la educación de mi país que nos advierten de que uno de los indicadores más claros en el fracaso escolar de los niños y jóvenes españoles (¿y dominicanos?) es el número de libros que hay en el hogar familiar. Así, en aquellos hogares donde los padres no tienen libros y, por tanto, no leen libros, la probabilidad de que los hijos fracasen en la escuela es mucho mayor.
Leyendo las reflexiones del profesor se podría quizás extender la hipótesis a otro colectivo. Esto es, habría que hacer alguna investigación (¿aquí?, ¿en España?) sobre el número de libros que los propios profesores tienen y consumen, y la incidencia que todo ello pueda tener en el fracaso escolar.
Saludos,
Juan
Asi es Prof. García, en el Segundo Estudio Regional Comparativo y Explicativo en que participaron 16 países de la región, el número de libros en la biblioteca y su uso, así como la existencia de una cultura lectora en la familia, eran factores importantes. Por supuesto que el contexto en que se desarrollan los estudiantes son importantes y sobre todo cuando en el mismo se valora la educación. Actualmente se está haciendo un estudio sobre el papel que tiene la valoración de la educación por parte de la familia y el propio estudiante en su permanencia en la escuela. Estos son cuestiones importantes.
En nuestro país, y pienso que es la situación de muchos otros países hay que insistir en la formación inicial y continua del maestro, así como sus condiciones de vida como factores claves en la calidad educativa. El maestro es un profesional de la enseñanza y de la gestión de oportunidades para aprender, lo que supone dominar el contenido de lo que enseña, al mismo tiempo que saber cómo enseñar. Ambas cuestiones son inseparables.
En este momento insisto en la formación y en el acompañamiento permanente y efectivo.
Exelente y veridica aportacion a la sociedad, en primer lugar el tema libros estudiantes y econia es un caos, al parecer estudiar es mas que una necesidad una obligacion cultural es como un lujo, el Mercado que hay referente a los libros atrasa una gran mayoria de la poblacion dominicana. comparto la idea de la lectura en los hogares, que ayan libros en las mesas de laas casa de familia y asi fonmentar el habito de studio y lectura.
dice la biblia que el pueblo perece por falta de conocimiento y sin estudios no hay conocimeintos sin libros no hay estudio efectivo.
saludos cordiales
Es un reto del sistema educativo Dominicano asumir un mayor esfuerzo y concentración en la formación inicial y continua de los docentes que tienen la responsabilidad de desarrollar todas las oportunidades necesarias para que nuestros niños, niñas y Adolescentes aprendan. Mas importantes aun utilizar las vías necesarias, como son los libros y todas las vías de la información, que contribuyen a la formación de nuestros maestros, pero a partir de un eje fundamental docentes altamente capacitados y con las competencias necesarias para desempeñar dignamente su labor docente.
Buenas tardes.
El enfoque que se tiene hoy día sobre la educación, es diferente se puede decir que hemos avanzado tímidamente, pero se esta logrando, pero no es suficiente, mientras no se abandonen las malas praxis del amiguismo y al clientelismo, del presente que aun se vive. La República Dominicana, sí nuestro país esta preparando docentes con una buena calidad para poder ejercer en su función como docente, creo que hay que tomarlo en cuenta y en cuanto al crecimiento estudiantil el progreso es bueno, porque la sociedad quiere, desea aprender y ahora tenemos mejores medios para conseguirlo.
Hola!!
Estudiando y analizando los contenidos leídos, pude observar:
Los libros de textos, son caros, para las familias, y no son prácticos, ahí no discrepo con el autor; pero el docente de la escuela moderna o de la educación actual , se le está enseñando de otra manera, que ya no sea una educación tradicional, estática, memorizadora y repetitiva y vertical entre otros. Ahora se busca con la nueva escuela que sea: práctica, participativa, y horizontal.
Es una realidad que el gobierno esta haciendo importantes y altas inversiones en la educación, pero el tema del excesivo y abusivo costo de los libros, en especial para la educación de media y básica esta siendo un dolor de cabeza, para la sociedad dominicana.
Especial, si tomamos en cuenta lo bajo que son los salarios promedios de nuestro país, lo que hace en algunos casos imposible que los padres puedan enviar a todos sus hijos a las escuelas, y sabemos que la educación es el motor para alcanzar el desarrollo de un país.
Antes los padres compraban un libro y el mismo servia para la educación docentes de todos sus hijos, pero la realidad actual es otra.
Las editoras privadas son las mismas que suplen los libros al Ministerio de Educación, por lo que no se entiende la diferencia de precios entre unos libros y otros.
Si las casas editoras no obtemperan, si no escuchan, si no acceden a un acuerdo, el Gobierno tendría que instalar una editora nacional, que tendría el control de los insumos para producir libros de texto más baratos.
Pero seguiremos confiados en Dios, de que el gobierno dominicano y sus autoridades no dejaran este tema en el olvido y tratarán de alivianar esta pesada carga para un amplio sector de la sociedad dominicana.
He sido testigo de cómo padres de familia de clase media y baja sufren cada inicio de año escolar por la necesidad de invertir en libros de texto que cada vez son más caros. Otra queja generalizada es el hecho de que ya los libros no pueden ser transferidos de un estudiante a otro, tanto porque la calidad del material utilizado para su impresión es muy baja como por el hecho de que se hace un cambio en el texto a ser utilizado en el mismo grado año tras año.
Tenemos el triste escenario en donde los docentes no dominan el material de los libros. ¿Cómo podemos ensenar sobre algo que no dominamos? La pro actividad debe ser una de las principales competencias del docente. Dominar todos los temas sobre los cuales debemos instruir, representa un gran reto.
Hola a todos,
Es una realidad que el gobierno está haciendo importantes y altas inversiones en la educación, pero el tema del excesivo y abusivo costo de los libros, en especial para la educación de media y básica está siendo un dolor de cabeza, para la sociedad dominicana y actualmente el sistema educativo no está orientado en mejorar esta situación.
Esta situación, aun es más traumática, si tomamos en cuenta que son los salarios promedios de nuestro país son muy bajos, lo que hace en algunos casos imposible que los padres puedan enviar a todos sus hijos a las escuelas, y sabemos que la educación es el motor para alcanzar el desarrollo de un país.
Si nos remontamos a los años 80, los padres compraban un libro y el mismo servía para la educación docentes de todos sus hijos, pero la realidad actual es otra.
Las editoras privadas son las mismas que suplen los libros al Ministerio de Educación, por lo que no se entiende la diferencia de precios entre unos libros y otros.
Si las casas editoras no obtemperan, si no escuchan, si no acceden a un acuerdo, el Gobierno tendría que instalar una editora nacional, que tendría el control de los insumos para producir libros de texto más baratos.
Es un nuevo reto que debe de enfrentar los actuales y futuros profesionales docentes, de no ver el libro como la única fuente de información en el aula, debemos de trabajar y adaptar nuestra práctica docentes a la realidad en que nos esté tocando vivir.
Pero seguiremos confiados en Dios, de que el gobierno dominicano y sus autoridades no dejaran este tema en el olvido y tratarán de alivianar esta pesada carga para un amplio sector de la sociedad dominicanos.
Buenas Noches. Considero que hoy en día el negocio de los libros se ha convertido en algo beneficioso para los centros privados. Pienso que es una gran desventaja para el aprendizaje de los estudiantes, principalmente para aquellos que tiene pocos recursos económicos.
Estoy totalmente de acuerdo con usted profesor y creo que ya se debe hacer un analisis completo sobre este tema que nos afecta a todos
LIBROS DE TEXTOS, GESTIÓN PEDAGÓGICA Y FORMACIÓN DE MAESTROS.
Todos los años, cuando se va a iniciara el año escolar surge con fuerza mediática, los libros de textos escolares, y hay una fuerte razón para ello los precios a los cuales han llegado esto son alarmante y escandaloso para la familia de clase media, cuando tienen que preparar a sus hijos para el inicio del año escolar, esta es una inversión apreciable. ya que esto es un negocio redondo, es no es una practica nueva, lo hacen para ganar dinero, por esta razón los padres prefieren usar libros electrónicos para el aprendizaje de sus hijos, ya que esta es una herramienta importantes, de igual manera los profesores deben continuar aprendiendo